La sala de conferencias de Bluelife en París, estaba llena de periodistas, personalidades del mundo científico y diversos invitados de todos los rincones del planeta. Marco hizo su aparición acompañado del director de la división espacial y su equipo de ingenieros. Llevaba pantalón negro, zapatos marrones, camisa de seda blanca y un conjunto de chaleco y chaqueta gris. Caminando lentamente y en silencio, observaba detenidamente al auditorio, como si quisiera reconocer a cada uno de los rostros presentes, saboreando cada instante de lo que estaba ocurriendo y sonriendo interiormente, aunque hacia los demás mostraba una actitud glacial.

Se acercó al micrófono e inmediatamente dio inicio la conferencia.

• Bonjour à tous – comenzó Marco hablando en francés con aire solemne – j’ai le grand honneur d’être devant vous pour vous annoncer une nouvelle d’une grande importance pour l’espèce humaine. Ce projet représente un rêve que j’ai depuis très longtemps et vous comprendrez si je souhaite vous communiquer cette grande nouvelle dans ma langue maternelle.

Hubo una larga pausa, el auditorio se mantenía en silencio expectante de las siguientes palabras de Marco. De pronto, se activaron las pantallas de traducción y Marco prosiguió en español.

• Hoy, 23 de noviembre del año 2067, la especie humana ha superado uno de los más grandes retos desde que llegamos a la Luna. Por primera vez el homo sapiens ha puesto un pie en Marte. A las 00 horas con 23 minutos PST (Pacific Standard Time) la nave BlueExplorer amartizó luego de más de nueve meses de viaje y con la tripulación a salvo y en buenas condiciones de salud.

Este éxito es el resultado de un largo esfuerzo de muchos años y se lo dedicamos a la memoria de los valientes astronautas que perdieron su vida por nosotros en la misión Space X 2040. Gracias a su esfuerzo y sacrificio es que hoy me encuentro delante de ustedes para realizar este anuncio.

Este evento representa un nuevo hito en la exploración espacial humana. En el año 2060 nos enfrentamos a una noticia que remeció los cimientos de nuestra civilización. El hallazgo de ruinas en el polo norte marciano nos mostró que quizás hubo vida inteligente en Marte o que quizás aún exista vida inteligente escondida en alguna parte del planeta rojo y que por alguna extraña razón ha pasado desapercibida a nuestros constantes estudios y análisis del planeta.

Muchas preguntas surgieron en aquel entonces. Esto desencadenó la reactivación del programa de exploración y el diseño de la misión BlueExplorer que con éxito llegó a su destino el día de hoy.

Los objetivos de esta misión son muy importantes. La humanidad va en busca de respuestas sobre la existencia de vida en Marte y también a estudiar la viabilidad del establecimiento de una primera colonia humana. Para ello, una tripulación de valientes astronautas se encuentra en estos momentos a 250 millones de kilómetros de nosotros preparando las primeras etapas de un proyecto de colonización a largo plazo.

Es un honor para mí tener que comunicarles esta noticia y decirles que este es solo el inicio de los ambiciosos planes que Bluelife tiene para llevar a la humanidad hacia las estrellas.

La presentación de Marco prosiguió para luego dar paso al director de la división espacial en donde se hablaron de una serie de detalles técnicos y se mostraron las primeras imágenes de humanos sobre el suelo marciano. El planeta entero se encontraba paralizado y todos tenían los ojos puestos en esta conferencia y seguían minuto a minuto la transmisión que iba mostrando las primeras imágenes a medida que estas llegaban frescas de Marte cada 15 minutos.

A pesar de haber esperado esa conferencia de prensa durante mucho tiempo. No estuve atento a ella. El televisor de mi cuarto estaba apagado. En esos precisos instantes me encontraba en mi propio viaje hacia el corazón de Karla y en mi propia misión de exploración y descubrimiento. Llegué a mi destino sano y salvo y con una sensación de bienestar plena y sorprendiéndome de los sentimientos que había creado mi cerebro.

Había descubierto el amor en alguien dispuesta a acompañarme en mi aventura hacia el planeta rojo.

A partir de ese momento, la dinámica del planeta Tierra cambió. En todos los programas de televisión se hablaba sobre lo que se podría descubrir en las ruinas de Marte. Muchas teorías de todo tipo eran compartidas en las redes sociales, en los noticieros y en todos los medios de comunicación en general. Había mucha expectativa y solo se hablaba de eso todos los días. Hubo otro grupo de personas a quienes les entró pánico de conocer la verdad y se fueron desconectando del mundo y fueron engrosando la larga cifra de suicidios que fue en aumento desde el descubrimiento de las ruinas en el año 2060.

Las religiones siguieron perdiendo creyentes y otros grupos y sectas se fueron fortaleciendo. Runa, contaba cada vez con más miembros que venían de varias partes del mundo buscando la soledad y la paz de las montañas peruanas.

La inteligencia artificial continuaba a hacer efecto en la masa laboral humana y muchos países aún no habían encontrado una solución al problema. Muchas personas se quedaron sin empleo y vivían de ayudas gubernamentales que solo alcanzaban lo justo para sobrevivir y sin posibilidades de encontrar otra fuente de ingresos. La sociedad estaba estresada por este tema. Y era habitual ver protestas violentas al respecto en varias partes del mundo.

La dominación de la corporación Bluelife en los diversos sectores en los que se desarrollaba era cada vez más arrolladora y fue ganando cada vez más detractores quienes veían en Marco a una persona con fines oscuros, que quería conquistar el mundo y las estrellas debido a una ambición personal y totalitaria. Muchos temían que Marco se convierta en un todo poderoso emperador de la humanidad.

Quizás sus miedos no estaban del todo infundados.

La sociedad estaba entrando a una etapa de desgaste. Y solo las respuestas que la misión BlueExplorer iba a aportar parecían dar una luz de esperanza a todos. Era como si millones de humanos alrededor del mundo, que vivían vidas patéticas, sin empleo y sin esperanzas de mejorar su calidad de vida se hubieran abandonado a lo que la misión en Marte les iba a dar como respuesta. Vivían adictos a la pantalla esperando un milagro proveniente del planeta rojo.

Así, los meses fueron pasando y las primeras respuestas comenzaron a llegar.

• Marco, tiene una llamada urgente del director de la división espacial – le dijo su asistente con un tono un poco estresado – me ha indicado que es un tema de alta importancia y confidencialidad – añadió nerviosa.
• Gracias Ariana, yo me encargo personalmente de comunicarme con él – Marco, siendo frío como era, no pudo evitar sentirse incómodo al notar que su frecuencia cardíaca había aumentado un poco debido a la expectativa de esta comunicación. Marco estaba acostumbrado a tener el control sobre todo, incluso sobre sus emociones.

Se dirigió a su escritorio y extrajo de uno de los cajones un dispositivo rectangular que tenía dos conectores RJ11. En uno de ellos conectó un auricular que parecía ser sacado de las viejas películas de los años noventa del siglo veinte y en el otro conectó un cable rojo que se encontraba guardado en un compartimento especial de su escritorio. Se trataba de un módulo de encriptación de comunicaciones de línea fija, difícil de detectar con tecnologías modernas. Marco, con el objetivo de asegurar comunicaciones confidenciales, construyó su propia red de comunicación mundial de línea telefónica usando protocolos y tecnologías de comunicación del siglo pasado para reducir los riesgos de espionaje. Todas las sedes de Bluelife se encontraban interconectadas vía cable en una red privada.

• Patrick, como estás ¿qué es lo que me quieres decir que es tan urgente y confidencial? ¿es lo que me imagino? – preguntó Marco manifestando un gran interés en la respuesta que iba a recibir.
• Marco ¡hemos llegado a la pirámide! El equipo de la expedición Alpha se ha acercado lo más posible a la pirámide con el vehículo de exploración. Debido a lo accidentado del terreno, la siguiente etapa del trayecto se efectuará a pie. Nos encontramos a aproximadamente 5 horas de llegar al objetivo. He dado una orden de alto a los equipos para comunicarte esta noticia y poder incluirte en la comunicación en tiempo real. Estamos usando el canal interno de comunicación para transmitir las imágenes. Todas las comunicaciones están encriptadas y solo esperamos que te conectes para proseguir con la misión.
• Hiciste bien Patrick, gracias, ahora mismo me conecto – replicó Marco mientras iniciaba un software especial diseñado para esa situación. Marco se conectó a la transmisión desde una gran pantalla que tenía frente a su escritorio. Dio señales a su asistente de que no lo molesten y canceló todas sus reuniones – Estoy conectado, prosigamos con la misión.
• Entendido, equipo Alpha, prosiga con la misión – ordenó Patrick.
• Entendido señor – replicó el supervisor de la misión en Tierra quien dio la orden de continuar al equipo que se encontraba en Marte. Las primeras imágenes comenzaron a llegar y a proyectarse frente a la mirada de asombro de Marco. Estaba viendo desde la comodidad de su escritorio, aquella pirámide que cambió la historia de la humanidad hacía tan solo 8 años.

Las fotos llegaban acompañadas de datos concretos. La pirámide tenía una altura aproximada de 700 metros y los obeliscos medían aproximadamente 1km de altura cada uno. El material del cual estaba hecha la pirámide parecía ser algún tipo de metal, o una aleación de diversos metales, o algún tipo de material compuesto de metales que permitía dar ese ligero brillo en la superficie lisa de la estructura. Era difícil de determinar, el equipo de exploración aún no había entrado en contacto directo con el objetivo. Se estaban acercando poco a poco y el avance desde la perspectiva terrestre era muy lento.

El sistema de comunicación para esta misión de exploración se implementó de una manera ingeniosa. En el año 2040, el Rover estuvo perdido durante varios meses sin comunicación luego de haber entrado a la gruta. Para asegurar una comunicación permanente con la base marciana y con la Tierra, el equipo de exploración fue posicionando antenas de transmisión a lo largo de su recorrido, lo que permitió mantener una comunicación constante a pesar de encontrarse en las profundidades de la gruta.

Pero a pesar de toda esa infraestructura, debido a la distancia con la Tierra, los datos transmitidos desde Marte llegaban con un retraso de 15 minutos. Incluso alguien muy paciente como Marco consideraba una eternidad esa espera cuando estaba a punto de obtener las respuestas que la humanidad buscaba sobre la vida en el planeta rojo.

• Patrick ¿podemos pasar al modo de transmisión en vivo? Me gustaría ver que es lo que ven nuestros equipos en tiempo real aun así la transmisión sea en diferido. Prefiero eso a recibir informaciones cada 15 minutos.
• Marco, la transmisión se puede realizar de esta manera, pero vamos a consumir prácticamente la totalidad del ancho de banda de nuestras comunicaciones y es probable que aun así haya cortes durante la transmisión.
• Da la orden Patrick – Marco sabía ser convincente cuando necesitaba de algo.
• Entendido… Control, activen la transmisión en vivo. Vamos a acompañar a nuestros equipos en tiempo real, tomar en cuenta el desfasaje en caso de que tengamos que dar instrucciones desde la base en Tierra.
• Entendido – Dijo una voz desconocida. 15 minutos después una transmisión de audio y video comenzó a proyectarse en la pantalla de los equipos en Tierra. Marco se inclinó sobre su escritorio colocando los codos y juntando las manos apoyando su nariz en ellas. Estaba muy atento a lo que se estaba visualizando.

El equipo de exploración Alpha estaba compuesto por cinco miembros. Un líder de expedición científica con formación en biología, un geólogo, un arqueólogo y dos miembros de la fuerza de seguridad espacial de Bluelife. Llevaban un equipamiento de exploración y armamento de última generación.

La gravedad en Marte es de 3,7 m/s², es decir aproximadamente 62% inferior a la gravedad en la Tierra. Esto hacía que el desplazamiento en la superficie marciana sea ligero, ya que cada integrante pesaba 62% menos que en la Tierra. El equipo se acercaba lentamente a la pirámide, teniendo mucho cuidado de no hacer movimientos bruscos debido a la fuerza extra con la que contaban y a la posibilidad de perder el equilibrio y sufrir algún accidente.

La gruta de hielo en donde se encontraban era de dimensiones colosales. Tenía una altura aproximada de 2 km y cubría un área de aproximadamente 20 km². La superficie por la que caminaban tenía lugares accidentados pero la mayor parte parecía ser un desierto blanco muy horizontal conformado por nieve y hielo. Estalactitas y estalagmitas gigantes acompañaban el paisaje y no parecía haber vida de ningún tipo. Las ruinas parecían ser el único indicador de una vida pasada en aquel lugar.

El equipo llegó a la pirámide luego de varias horas de caminata. De cerca, el aspecto de la estructura permitió identificar que, en efecto, el material estaba compuesto de alguna aleación metálica y otros minerales. La pirámide parecía intacta y se encontraba enterrada bajo nieve y hielo. Los obeliscos eran imponentes y se encontraban separados a 1km de distancia cada uno, lo que otorgaba a la pirámide una superficie cuadrada de 1Km², pero parecían estar destruidos en la parte superior. No se podía apreciar a simple vista ningún tipo de entrada o algo que pueda identificar dicha construcción como un edificio que alguna vez haya sido habitado. Toda la superficie era perfectamente lisa como si cada elemento, la pirámide y los obeliscos, hubiesen sido fabricados de una sola pieza y esculpidos en láser de manera perfecta.

• Procedemos a realizar un análisis de la composición del material – indicó el geólogo.
• Inicializando el dron de exploración para reconocimiento de la pirámide – indicó el líder de la expedición.
• Primeros análisis de la composición de la estructura confirman una composición mixta de rocas y metales – informó el geólogo luego de observar los primeros resultados de su análisis – Como resultados preliminares encontramos 60% de roca, 10% fierro; 20% de titanio y 10% por determinar. Estos resultados se han obtenido a partir del analizador de espectro portátil. Un análisis más profundo tiene que ser realizado luego de obtener una muestra. Pero por el momento, según el protocolo de acción, aún no vamos a entrar en contacto físico con la estructura. Procediendo a un análisis preliminar de datación de la estructura – finalizó el geólogo.
• Conectando el sistema de visualización del dron al canal central de comunicación – informó el líder de la expedición – En unos instantes control va a recibir la señal del dron de reconocimiento.

El dron realizó un vuelo de reconocimiento rodeando la pirámide. La estructura era imponente. El aspecto liso era general en toda la construcción. Un análisis infrarrojo no reveló ninguna fuente de calor ni tampoco se detectó ningún tipo de radiación proveniente de la pirámide. Lo interesante vino cuando se inició el análisis de resonancia magnética molecular para intentar ver al interior de la construcción.

Se pudo identificar en una de las caras de la pirámide una entrada que se encontraba enterrada bajo varios metros de hielo y nieve. Era una especie de portal de aproximadamente 10 metros de altura y 20 metros de ancho. Detrás de dicho portal se pudo distinguir lo que sería un largo pasillo que se internaba en las profundidades de la pirámide. El análisis solo permitía llegar hasta unos 30 metros de profundidad, con lo cual para saber más habría que entrar.

De pronto, el geólogo interrumpió la trasmisión.

• Aquí Alpha G – El código G indicaba que él era el geólogo – Tengo los resultados preliminares de la datación de la estructura…
• Adelante Alpha G – Respondió el líder de la expedición.
• Señores – replicó Alpha G haciendo evidente la emoción que sentía en ese momento – según los resultados preliminares nos encontramos frente a una estructura de aproximadamente 1700 millones de años de antigüedad…

15 minutos después

En la Tierra esta transmisión había llegado a oídos del equipo de control y a un estupefacto Marco que no podía creer lo que acababa de escuchar. Marco cambió de pantalla para buscar en sus archivos la primera imagen que habían recibido en el año 2040 por parte del Rover. Imprimió la imagen. Se puso de pie. Con la imagen en mano se acercó a una de las paredes de vidrio de su oficina que tenía una vista sobre Paris. Observó la ciudad de noche. Miles de personas transitando por las calles, siguiendo su rutina diaria, preocupándose por cosas triviales y terrenales sin saber que a millones de kilómetros en el planeta rojo acabábamos de encontrar una de nuestras primeras respuestas sobre la vida en Marte.

Marco acercó la foto a su rostro. La miró detenidamente, y lanzó una carcajada de alegría.

• ¡Patrick! – dijo Marco, conectándose nuevamente al sistema de comunicación – Podemos parar por hoy la expedición, el equipo merece un descanso, han hecho un buen trabajo. Que se comuniquen con la base marciana para que envíen refuerzos a la Pirámide lo antes posible. Mañana comenzaremos los trabajos de excavación. Vamos a tocar la puerta de la casa de nuestros muy pero muy viejos amigos marcianos.

Poco a poco el planeta rojo nos iba develando sus secretos. Ahora sabíamos que, hace 1700 millones de años, hubo vida inteligente en Marte capaz de controlar los minerales de su entorno y producir construcciones sofisticadas ¿Su tecnología sería más avanzada que la nuestra? ¿Qué aspecto tenían? ¿Qué fue lo que les ocurrió? ¿Se extinguieron? ¿Están escondidos en algún lado en Marte?

Para saber más solo teníamos que abrir la puerta.